ALBUQUERQUE, Nuevo México – Se informa que el presidente Trump está desarrollando un plan para establecer una zona de amortiguamiento militar a lo largo de la frontera, especialmente en Nuevo México.
Según The Washington Post, las discusiones sobre este proyecto han estado ocurriendo durante varias semanas, y su implementación podría generar nuevos problemas legales para quienes intenten ingresar al país sin autorización.
Este plan convertiría una sección de la frontera en Nuevo México en una instalación militar semi-permanente, otorgando a los soldados el derecho de detener a los migrantes que crucen, similar a la forma en que se manejaría a los civiles que ingresan ilegalmente a bases militares.
Si el plan se lleva a cabo, la zona controlada por el ejército se extendería 60 pies hacia el interior, a lo largo de la frontera.
El jueves, la gobernadora Michelle Lujan Grisham expresó su desacuerdo con el plan. Declaró: “La decisión del presidente de crear una zona de deportación en la frontera de Nuevo México es un desperdicio de recursos y personal militar”.
Hasta ahora, el Pentágono, el Departamento de Seguridad Nacional y la Casa Blanca no se han pronunciado sobre el plan. Sin embargo, en los últimos días, se ha observado el arribo de más tropas a la frontera.
En video se muestra a miembros de la 4ª División de Infantería de Fort Carson, en Colorado, llegando a Fort Bliss, en El Paso, para una “misión fronteriza” en colaboración con el Departamento de Seguridad Nacional.
Mientras tanto, el zar fronterizo Tom Homan participó el jueves en una discusión sobre inmigración junto al gobernador de Florida, Ron DeSantis, y otros funcionarios en Florida.
Homan afirmó que considera que la ciudadanía por nacimiento es un factor clave en la inmigración ilegal y que quiere que la Corte Suprema decida si esta práctica está garantizada constitucionalmente.
La administración Trump había intentado previamente limitar la ciudadanía por nacimiento, excluyéndola para aquellos nacidos de padres que no sean ciudadanos o residentes legales permanentes.
Sin embargo, la orden fue bloqueada por un juez federal y actualmente está siendo revisada en el sistema judicial.
