ALBUQUERQUE, Nuevo México – Una mujer de Albuquerque enfrenta varios cargos tras confesar a la policía que queria lastimar a su bebé.
El domingo, el Departamento de Policía de Albuquerque encontró a Jessica Crespin en una parada de autobús, desorientada y acompañada de su hija de dos años, quien solo vestía un pañal bajo la lluvia. Los agentes sospecharon que Crespin estaba atravesando una crisis de salud mental, posiblemente relacionada con el consumo de metanfetaminas.
Según informaron las autoridades, Crespin declaró que quería cortarle el cuello y las muñecas a su hija. En su poder se encontró un cúter. La menor presentaba laceraciones visibles en el cuello y en una pierna. Fue trasladada al Hospital de la Universidad de Nuevo México para ser evaluada y sometida a pruebas toxicológicas. Los resultados aún no han sido dados a conocer.
