
ALBUQUERQUE, Nuevo México – El jefe de la policía de Albuquerque, Harold Medina, se reunió este miércoles con el Fiscal General de los Estados Unidos como parte de una mesa redonda nacional sobre seguridad pública. Durante el encuentro, Medina alzó la voz en contra de los mandatos federales de inmigración que, según él, ponen en riesgo el financiamiento de las agencias locales.
En su calidad de presidente de la Major Cities Chiefs Association, Medina destacó la oposición del organismo a que policías locales participen en la aplicación rutinaria de leyes civiles de inmigración. Esta postura cobra relevancia ante amenazas del expresidente Donald Trump, quien ha planteado la posibilidad de retirar fondos federales a ciudades y condados que se nieguen a colaborar con estas políticas.
“Los jefes de policía en las ciudades más grandes del país estamos enfocados en combatir el crimen y proteger a nuestras comunidades,” afirmó Medina. “Agradecemos los recursos federales que nos ayudan a reducir la delincuencia, pero no queremos mandatos federales, ni convertir a nuestros oficiales en agentes migratorios.”
El alcalde de Albuquerque, Tim Keller, también expresó su apoyo al jefe Medina:
“La ciudad de Albuquerque tiene la fortuna de contar con un jefe de policía reconocido a nivel nacional, que trabaja en colaboración con otros líderes para proteger a nuestras familias de políticas peligrosas provenientes de Washington.”
Medina continúa su labor en defensa de la autonomía local en la aplicación de la ley, destacando el compromiso de la ciudad con la seguridad pública basada en prioridades locales.


