
ALBUQUERQUE, Nuevo México – Aunque el verano está llegando a su fin, las temperaturas siguen altas. La ciudad de Albuquerque ha tomado medidas para proteger a los inquilinos y reducir la exposición peligrosa al calor.
La Ordenanza O-59, que entró en vigor el 1 de julio de 2025, exige que todas las propiedades de alquiler cuenten con sistemas de refrigeración. De acuerdo a las autoridades desde su promulgación, se han realizado más de 60 llamadas de servicio y 20 inspecciones, lo que ya ha permitido resolver 19 problemas de refrigeración.
Estas leyes buscan establecer normas claras para prevenir tratos injustos, como desalojos repentinos o prácticas de alquiler abusivas, y garantizan que los inquilinos tengan acceso a condiciones de vida dignas. Al establecer una base de derechos y responsabilidades, las ordenanzas ayudan a equilibrar la relación entre propietarios e inquilinos, reduciendo los conflictos y fomentando la confianza.
“Tener aire acondicionado en casa no es un lujo, es una necesidad”, dijo el alcalde Tim Keller . “Esta ordenanza busca proteger la salud y el bienestar de las personas y garantizar la seguridad de los inquilinos durante el intenso calor del verano”.
La Ordenanza, patrocinada por la concejala Tammy Fiebelkorn, modificó el Código Uniforme de Vivienda para exigir que los arrendadores proporcionen a sus inquilinos sistemas de refrigeración en sus viviendas de alquiler. Aprobar la Ordenanza de Refrigeración va más allá de proteger a la comunidad durante veranos calurosos y olas de calor peligrosas; se trata de restaurar la dignidad, la estabilidad y la seguridad de nuestras comunidades.
El agotamiento por calor y la insolación son riesgos reales, especialmente para niños pequeños, adultos mayores y personas con problemas de salud. Albuquerque se compromete a lograr una vivienda más humana y resiliente ante el cambio climático.


